24-5-2016 Malagueño, un toro triunfador. Lo merecía David Mora.

Salió el segundo toro de la tarde, de la ganadería de Alcurrucen, de 563 kgs., nacido en septiembre de 2010, lo primero que hizo es “comerse” el burladero del tendido uno. Al capote entra con mucho ímpetu , su matador sale del encuentro como puede, se le cuela, porque el viento le mueve el capote, se centra y da verónicas de la firma. Al tercio de varas, en el primer encuentro, va apretando según siente el hierro, con menor fijeza. En el segundo encuentro va de lejos y galopando ( mi compañero de localidad hoy, es un aficionado mejicano, y me dijo:” nunca he visto un toro arrancar con tanta alegría, galopando, al caballo...”). Roca Rey fue a por su quite, con viento, se echa el capote a la espalda, apretándose al astado, por ambos lados. Y David Mora va a replicar, también capote a la espalda, luce capote al viento, logrando ajustados lances y el remate menos limpio. Sale aplaudido Israel de Pedro, por sus dos puyazos. No menos importante fue la brega de Ángel Otero, capotazos muy limpios, largos y sin molestar.

Hasta aquí un “pero”, y una pregunta ¿por qué no se llevó por tercera vez al caballo? Debió haberse visto antes el gran toro que se corría. El presidente, junto a sus asesores, tienen que verlo más claro, ser mejores aficionados y estar más atentos. Y si no, que lo pida el matador.

Si hay que poner algo, insignificante, en negativo,  se refugió en tablas, junto al burladero del uno, antes de arrancar a la muleta. David Mora, se va acercando y dándole toques, se resiste a arrancar y se le ocurre al matador , sobre la marcha, darle un pase cambiado por detrás, está cerca a unos 12 ó 15 metros,.. Le arrolla, se lo lleva por delante, se lo hecha a los lomos, se queda inerte en el suelo, pensábamos que iría para la enfermería, pero se repone. Le enseña la muleta con firmeza y el toro se la come, hace el “avión”, se arranca como un “ tren a.v.e.”, toma la muleta muy adelantada y la sigue hasta el final, unas series muy largas y emocionantes.

(Fotografías obtenidas de la web de Las Ventas)

Los espectadores estaban emocionados ya con David, por su reaparición de la gravísima cogida que tuvo en esta misma plaza el 20 de mayo de 2014, la plaza en pie le hizo saludar al rompen el paseillo. Y en agradecimiento, le brinda el toro al cirujano jefe de la plaza, D. Máximo García Padrós, haciéndole salir al ruedo (los veteranos de la plaza recordamos la retirada de su padre D. Máximo García de la Torre, también recibiendo una enorme ovación).

La faena era toda una emoción, su matador, aguantando las embestidas, con largas series, quizá algunos podían haber sido de mayor pureza, y otros más ajustados. Probó la izquierda, pero, su banderillero, Pedro Calvo, desde el burladero del uno, no paraba de enseñarle la mano derecha. Con la diestra el toro va como la “seda” y transmite una inmensidad, no termina de galopar, con la boca cerrada. Se tira a matar, a por todas, y coloca una gran estocada.

La plaza estaba emocionada, porque David Mora, se merecía este triunfo, y porque el toro es el soñado por todos los toreros. Mi compañero de abono, Victoriano Garrido, colega aficionado práctico de Arganda, estaba llorando, lagrimas de alegría, a mí se me puso “carne de gallina” y el bello erizado, hacía años, no nos salían esos sentimientos.

La plaza se llena de pañuelos y el presidente, esta vez parece más aficionado, faltaría más, saca un pañuelo blanco, de inmediato el segundo, y sin dudarlo el pañuelo azul concediendo la vuelta al ruedo del toro.

Seguro que el toro tenía más, David estuvo bien. La duda es, en otras manos, estaríamos todavía toreando, pues quizá – la imaginación y la ilusión es infinita-. Es el toro que todos los profesionales sueñan tener y en la plaza más importante del mundo taurino. Algo así pasa cada unos treinta años. O, a ver si la suerte llama a la suerte y tenemos otro parecido en esta feria.

En el quinto, segundo de David Mora, su banderillero Ángel Otero fue ovacionado por sus dos pares de banderillas, con la muleta intentó agradar, era manso, estuvo en la cara del toro, insistiendo pero se defiende, con la cara por las “nubes”. Le receta media estocada y recibe silencio.

El comportamiento de la corrida fue variada entre la castita, mansedumbre, movilidad y nobleza.

Diego Urdiales, tuvo menos suerte, o pasó de puntillas, contó con un aceptable toro primero, encastadito, que tomaba la muleta por el pitón derecho con prontitud y velocidad, en las dos primeras series. Cambia de mano, cuándo la derecha transmitía mucho, por la izquierda se defendía más, va a peor. Vuelve a la derecha, pero, tarda en colocarse, produce muchas pausas. Se va descolocando. La faena claramente de más a menos. El toro tenía más emoción por la derecha. Pincha, media estocada y cuatro descabellos, le dan silencio. En su segundo, manso, muy mal picado, desde el 8 al 1 lanceándole, recibiendo gran bronca, se les va el toro al picador reserva, porque el matador se inhibe. Los banderilleros se descomponen, corriendo, no da facilidades. No quiere la muleta. Estocada fulminante, se le despide con un silencio.

Roca Rey, participando en todos sus quites, en su primero de comportamiento manso pero noble, en banderillas da pocas facilidades, con la cara alta. Con la muleta comienza por bajo, con ayudados, y naturales por debajo de los pitones. Por la izquierda se defiende con un saltito incómodo de salida. Insiste con la izquierda, pero, afortunadamente, con la derecha saca una nobleza que sorprende, se come la muleta. El toro le está pidiendo más distancia, que no le da, y se equivoca. Estocada, algo caída. Debió aprovechar mejor el pitón derecho. Ovación con saludos. El sexto, protestado, porque se quedó algo lesionado de los cuartos traseros, el presidente lo mantiene. En banderillas siguen las protestas porque las toma casi parado. El pase cambiado por detrás, al comenzar la faena de muleta es “marca de la casa”. Lo intenta por ambas manos, algo despegado, quizá desconfiado, no aprovecha la movilidad que tiene en la muleta, no práctica su toreo de proximidad, no lo ve claro. Quizá le esté pesando el ambiente de la plaza, hay que tener en cuenta que es un matador recién llegado. Le factura una estocada y recibe ovación con saludos.

Y llega “san miércoles”, con el cartelón , toros de Jandilla y Vegahermosa ( dios nos coja confesados, dos hierros para un cartel, no se augura nada bueno), para El Juli, Miguel Ángel Perera y López Simón.
Chema Cubero