Artículo del día 6/06: En el ecuador de la feria ( San Isidro, 2000).
El balance al superar la primera mitad, los catorce primeros festejos, del ciclo isidril no podía ser más negativo en cuanto al ganado lidiado, excepto en las dos primeras novilladas: resultó muy encastado el ganado de La Quinta ( con transmisión, movilidad, gran juego e interés para los aficionados) y los novillos de El Torreón ( excelente la pelea en varas, recibiendo hasta tres puyazos, prestándose a ligar tandas muy seguidas, gran acometividad,...).
En cuanto a los trofeos concedidos: dos orejas a Javier Castaño en su segundo novillo, sexto del festejo, fue premio a su enorme valor, dignidad y una quietud de asustar. Así como importante fue el debut de Martin Antequera, oreja, matando los seis novillos de La Quinta por cogida de sus dos compañeros antes de matar el primero de la tarde. Y a los matadores de toros, dos trofeos. Una oreja con mucha fuerza para David Lugillano y otra oreja para El Zotoluco de un toro muy encastado de la ganadería del Pto. de San Lorenzo.
En general el juego del ganado ha sido de muy baja raza y poca movilidad. Quizá alguno prodría haber servido más si los espadas lo hubiesen aprovechado olvidándose de tantas precauciones y se hubiesen centrado en el animal que estaba delante, teniendo en cuenta que cada toro tiene una lidia, con más o menos lucimiento: por esto no es admisible que el torero trate de traer la faena hecha desde el hotel. Todos los toros tienen su dificultad y el profesional la obligación de superarse y tratar de conseguir salir por la puerta grande al finalizar el espectáculo.
Los toros vistos en esta primera parte no aguantaban dos puyazos, solamente uno y un rasponazo. No obstante, cuando sale un toro con pies se le machaca en los caballos con el beneplácito de su matador. Es necesario que el toro tenga trapío, esté proporcionado, tenga una bonita cara con dos respetables pitones. En esta plaza no se quiere, desde hace tiempo, animales pasados de kilos. La afición no quiere elefantes.Tal vez en este momento sean algunos toreros a quienes les viene muy bien que los toros no anden para justificar sus pocas ganas de hacer bien las cosas en la plaza de Madrid.
No olvidemos que la base de la fiesta es el toro, por tanto tendría que cuidarse más su selección y comprar si la ganadería está en un buen momento... si no que no venga a Madrid en feria.
Hace algunos años las primera figuras hacían gestos, eran quienes no solo llenaban las plazas sino que se ponían de verdad, lo demostraban con las ganaderías más encastadas y nunca sus éxitos se nutrieron solo con las ganaderías dulces que presentaban pocas dificultades para el torero.En la actualidad, se está toreando con la muleta muy retrasada, eludiendo en lo posible el riesgo. Está de moda el medio pase.
Hay que llevar el toro toreado: es adelantar la pierna, "enseñar la femoral al toro", cargar la suerte, cruzarse a pitón contrario, al menos en el primer muletazo de la serie. Ligar al menos una serie completa, uno, dos, tres,... y el de pecho. Adornarse, y a matar por derecho... Ah, adelantar la muleta, rematar el muletazo en la cadera y templar, correr la mano para que no derrote en la pañosa y se le enseñe a cabecear (recurrido recurso a veces... cuando se quiere demostrar que el toro no sirve, o no se entienden, no hablan el mismo idioma.)
¿Y la mano izquierda, la que decían que " era la de los billetes..."?: hay que probar la envestida por los dos pitones.
Todo esto no puede llevarse acabo en la actualidad con este tipo de ganado que se está lidiando porque cuando bajan la mano se caen. Torean de enfermeros ,siempre rematando el muletazo o el capotazo arriba para que se mantengan en pie. Este es el tipo de toro que escogen las figuras.
Es por eso por lo que se esta haciendo un simulacro del toreo.
Con el capote se baila en exceso, cuando la quietud y " la pata pa'lante"es la ortodoxia del toreo. Excepto en la lidia que es el recurso para un tipo de toro que no se deja para lucimiento y hay que prepararlo para entrar a matar. Las figuras están haciendo quites muy vistosos pero moviendo los pies y sin ajustarse al toro, solo lo desplazan. El incumplimiento de la ortodoxia y el amaneramiento hace que se tenga engañados a los espectadores menos entendidos.
Los aficionados y profesionales saben que las figuras solas no estan llenando las plazas, excepto en Madrid que es otra historia (esnobismo, moda, al menos " hay que ir una tarde de feria...",... ). Está apareciendo el cemento en muchas plazas en tarde de corrida y esto tendría que hacerles recapacitar a muchos manipuladores de la fiesta.
La plaza de Madrid, por lo que llevamos de feria, estaría dejando de ser la primera plaza del mundo. Se está convirtiendo en una plaza más de provincia. Los espectadores no están manifestando masivamente sus protestas por el tipo de toro que está saliendo.No aprecian que los toros se están poniendo bastante mal en el caballo, que se hace la suerte de varas fatal y que se reprocha poco. Que se hace la carioca siempre (cerrando al toro la salida del caballo para pegarle más fuerte) ,dándole puyazos muy largos y fuera de la pelota . Hay mínimos tercios de quites.
En fin, señores, es necesario dar más novilladas, más oportunidades para los novilleros en la plaza de Madrid, que no tengan que poner dinero como en la mayoría de las plazas y que al menos puedan cobrar algo.Hay que ver en Madrid toros de la Asociación de Ganaderos que los hay y muy bravos, encastados, no se caen,... y que los toreros se apunte. Es necesaria una renovación...
Actualmente, los espectadores tendrían que manifestarse en contra de los toreros "figuritas de papel", apoyados en un excesivo marketing, cuando detectan que vienen a llevarselo ( hacerse ricos pronto) muy rápido y retirarse
Y de la debilidad de la cuadra de caballos, ¿qué..?. : se tiran al suelo cuando huelen a toro.
Los Delegados de la autoridad en el callejón tendrían que dejar este espacio más despejado para que pudieran trabajar mejor los ayudas y profesionales. Habría que obligar a que los monosabios ocupen su burladero y el personal de puertas tambien tapados en los burladeros durante la faena de muleta.
Los Sres. Presidentes tendrían que estar a la altura de la plaza de Madrid. Hay mucha diferencia entre los que anteriormente fueron delegados en el callejón de esta plaza y los que provienen de presidentes en otras plazas.
Los veterinarios son un auténtico coladero con los toros zambombos, escurridos, desproporcionados, "sardinas",...
Y el público, aunque venga por primera vez a esta plaza, tendría que ser más respetuoso con el escenario de la plaza. Hay que conocer el reglamento taurino y, si no, tendrían que ser más prudentes cuando piden trofeos, y más objetivos con los toreros.
Con el esfuerzo de todos, podríamos no dar pie para seguir repitiendo el dicho popular que nos acompaña algunas tarden en los tendidos: "Los regalos son para las tómbolas y las figuritas para los belenes".Habría que exigir que la plaza de Madrid siga siendo la referencia del toreo mundial. Quien no triunfe en Madrid no podrá ser considerado figura del toreo.
Esperamos que la segunda parte del ciclo nos deje una mejor impresión, sobre todo la semana torista. Tengo la seguridad que estos no van a caerse, pero ¿ quienes las matan?, ¿ dónde están las figuras?.