LOS TOROS EN SAN ISIDRO:
Es penoso que   trascurrida la mitad de la Feria de San Isidro tenga un balance tan desafortunado.
Ni más ni menos, porque se hizo muy mal la composición de los carteles: Las ganaderías con poco atractivo, porque repiten aquellas que llevan largo tiempo con sucesivos fracasos , el ganado mal presentado y  la terna de matadores en los que falta poner, al menos, un  "mandón" en cada cartel,...
Sobre  el reconocimiento de los toros: es sospechoso, simplemente, que se sigan manteniendo cuatro toros de la ganadería titular- cuándo se podía haber echado uno o dos más por falta de trapio o fuera de tipo-.
Los gestores de éste año, en el ecuador de la feria, tienen un balance muy cercano al fracaso artístico- no al económico-. Además, es la primera feria desde hace años que más cemento está apareciendo, y no es por la crisis- que también-, sino el hastío de los aficionados y esto tiene mal augurio, echar a los aficionados de la plaza  es menos costoso que  hacerles volver a las Ventas.
Viendo como se desarrollan los acontecimientos, que  las decisiones se toman pensando más en el coste económico que en el peso artístico de la tarde, el buen aficionado prefiere seguir alimentando  el gusanillo de la afición cerca de los toreros que empiezan y seguir como un romántico de la fiesta.
  Por lo tanto,  el abonado, en general,  no  adminte el engaño sistemático en la planificación de la feria de San Isidro ni  la programación de la temporada de Las Ventas, que cuenta con  la  supevisión de  Asuntos Taurinos de la Comunidad de Madrid.
Ah,  en plena crisis económica  y de ideas en la composición de los carteles  suben las localidades.
¡Es penoso que los aficionados y espectadores sean siempre los paganos! .Y  los gestores recien llegados planifiquen con el objetivo de obtener la máxima rentabilidad en el primer año de programación. Porque  ¿ cuánto les cuestan los toros de los güarismos(años) 6 y 7 ?  que los primeros éste año irían al matadero y los segundos se acogerían a la "prejubilación".
Sería muy evidente y clarificador conocer el coste real  de los toros de la feria anterior y de la actual, que se hiciera publico y comparar.
Y qué dice la Comunidad de Madrid, pues nada. Supongo que sienten cierta satisfacción de que el pliego siga siendo muy rentable para ambas partes contratantes.
Mientras este año desvían la atención echando el resto en la exposición del Arte y de la Cultura, la fiesta de los toros va pediendo fuerza, porque falta la emoción en el ruedo que es el principal ingrediente de la afición a los toros. Y  hace que los aficionados  que se acercan por la pureza de la fiesta caigan en el aburrimiento y tengan la sensación de haber estado sumidos en una siesta de tarde/noche .
Si no cambiamos el rumbo, esto se queda para dar pases y hacer pasar el toro, o sea ballet, picar poco,  un torito con embestidas suaves y cortas, mínima competitividad entre los espadas, pocos tercios de quites,... Y aquí todos contentos a cobrar los taurinos y a pagar las entradas en taquilla los espectadores,  quien corresponda  a recibir el canon de la televisión, comentaristas contentos- casi todo es bueno y bonito-, etc.etc.
Y a seguir con el objetivo de la rentabilidad hasta que la fiesta aguante.
¡Hay que  obtener máximos y rápidos beneficios porque la plaza de las Ventas tiene que ser  rentable, al menos, en la feria!.
Porque, las corridas de toros en los domingos del verano se  han cambiado por novilladas ( se abarata más la temporada) y  por ello  los carteles de la feria se parecen a los de domingos de otros años del verano.
Sólo queda tener paciencia y esperar a que la segunda parte sea mejor (hasta el rabo todo es toro).
¡ Qué remedio hay que utilizar todas las entradas  del abono y a las siete , en punto,a fichar!
Es de suponer que los ganaderos (por lo indicado  del güarismo y porque sobran toros) y los toreros están recibiendo menor retribución que el año anterior. ¿Entonces todos pierden?. No, no, sólo hay una parte que gana. Bueno dos: LA PROPIEDAD Y LA GESTIÓN.

JM Cubero