Sin arrugarse para nada, los  tres  valientes matadores de los llamados “modestos” los que necesitan y quieren triunfar en Madrid, para ganarse contratos , se  enfrentaban a otra modesta corrida de Paco Medina,  con el nombre de El  Montecillo. El señor Medina fue quien hizo la ganadería del Ventorrillo y en 2005 se la vendió a Fidel San Román (un  constructor de Marbella) por mucho dinero. Y  Medina comenzó desde “cero” en esta nueva aventura.

Sobre el papel era una corrida de las del montón, de las que se organizan para los fines de semana, o sea de más bajo perfil, para los “isidros” y aficionados del fin de semana, para que descansen los abonados de este “rally”, montado para ganar dinero, con el seguro de que los aficionados van a comprar obligatoriamente, 15.000.-ó 17.000.- localidades.

Ah! Y hablando de dinero, a plaza casi llena ¿ cuál será el cargo de taquilla de esta corrida? Pues, muy barata, señores, porque tanto el ganadero como los matadores están agradecidos y encantados de que les pongan en San Isidro. Salvo Adame que tiene tres tardes, porque se las ha ganado y por el peso de su apoderamiento.

El ganado, digamos que, en fase experimental, El Montecillo, no tiene más de dos o tres corrida para este año, no dio ninguna facilidad, toros engañosos, con recorrido y dando “bocados” en la muleta, cabezazos, saltos, buscando lo que había detrás de la muleta, recordando lo que se dejaban atrás. En fin, seis regalitos.

Ante ellos, los valientes y horados matadores:

 

MIGUEL ABELLAN, de blanco y oro, como en otras gestas de hace años en esta plaza, con este color  salió por la puerta grande hace más de diez años.

Se va a la puerta de chiqueros a esperar a su primero. Se presagiaba entrega total. Miedo daba conociendo a este valiente matador, si se le “calienta” la cabeza. La larga de chiqueros y dos más de rodillas. Quite de Paco Ureña, por gaoneras  - podía ser una tarde de quites pensamos -. Brinda al público, con mucho viento. El toro galopando en la muleta y Miguel se la pone muy planchada, tanto por izquierda como derecha. Sigue templando mucho. Pero, el pitón izquierdo era para no verlo. Muy violento. Le pega una “paliza”, en una cogida  y después, durante una serie, un puntazo en la asila. Lo mata de estocada, que hace guardia, echándose muy derecho. Pinchazo hondo, Tres descabellos. Cruza el centro del ruedo, entre aplausos, camino de la enfermería.

Su segundo, que se corre en quinto lugar, para dar tiempo a reponerse en la enfermería. Sale algo tocado a matar su toro. Lo para bien con el capote. Y con la muleta está hecho un tío, valiente y cruzado en todo momento, con un toro que tuvo muchas dificultades en el embroque, pero las aguantó. Al final parecía que el toro era mejor  por lo bien que lo templo y lo lució. Estocada y Oreja, muy a ley.

PACO UREÑA, soportando muchísimo viento, le toca un toro, con sosería que va y viene, se mueve sin clase alguna para embestir. El torero está con una voluntad de hierro. Se lo quita con una estocada, delantera caída, de efecto fulminante. Recibe silencio.

En su segundo, que corre en cuarto lugar por estar Abellán en la enfermería, hay que ser muy “macho” para estar en la cara de ese toro, que la toma dando hachazos, cabezazos y buscando. Se cruza muchísimo, sacándole algunos muletazos muy templados. Estatuarios acompañados de mucho viento. Con la derecha se luce y el de pecho. Por la izquierda, muy baja la muleta y lo trae de largo. Pero, en una serie el toro hace por su muslo y le hiere. Continúa con la faena. Una vez  estoqueado, recibe aplausos camino de la enfermería, es el segundo matador que cruza del ruedo herido, en la tarde de hoy.

JOSELITO ADAME, con el peor lote, y ya eran malos los de sus compañeros, se muestra muy muy valiente. Su regalito primero, con falta de fijeza, corretón, sale suelto,.. Desarma a varios que encuentra delante.. Sigue el viento. Con todo eso hace una lidia, exquisita, de toreo antiguo, doblones hasta pararle y bajarle la “tiesta”. Dos pinchazos y estocada baja, dan fin al marrajo. Recibe silencio. Y el toro es pitado en el arrastre.

Su segundo, es otro manso, que no quiere la puya, da saltos ante el castigo. Ante eso brinda al público. Comienza con la muleta en la derecha, cruzado, adelanta la muleta. Pero, se encuentra con la embestida muy corta. Parones en el centro del lance, aguantándolos trasmite emoción a los tendidos. No es toreable. Lo despacha de media. Silencio.

Fotografías obtenidas de la web de la plaza de toros de Las Ventas

En definitiva, impresionantes pitones y mucha guasa con los seis astados, que en otras manos sólo hubiésemos recordado el “pasaporte” hacia  el patio de arrastre.

Chema Cubero