Artículo del día 5/06: Corrida de espectación, corrida de decepción..
Madrid, 17 de mayo. Plaza de Las Ventas .Toros de la ganadería de Samuel Flores y Dª. Manuela Agustina Lopez Flores (2º y 3º) para Enrique Ponce, Rivera Ordoñez y Julian López "El Juli", que confirmó la alternativa. El resultado fue bastante pobre, repartiéndose casi por igual palmas, silencio y algunos pitos.
Es básica en una corrida la transmisión del toro de lidia para que los aficionados y espectadores rompan en aplausos y se apasionen. Si esa pasión y la emoción no se lleva a cabo en el ruedo y no llega a los tendidos, el resultado de la corrida es pura "danza". El torero es plasticidad, elegancia y dominio de un toro colaborador. Cuando falla el toro no hay materia prima. Por eso, si los toreros insisten en dar pases, se mueve el torero y no se mueve el toro: se parecen a enfermeros al cuidado de inválidos. Se asemeja a un cuadro de ballet ante el espejo:" espejo, espejito que figura más bonita compongo".
Comprendo que es muy difícil asimilar que en la plaza de Madrid hay que intentar hacer un toreo "distinto" al del resto de los cosos del centenar de corridas que matan estas figuras. En ese montón de tardes torean de una forma muy "estándar" y los espectadores les premian con orejas en casi todas las faenas. Hoy en Las Ventas tendrían que haber expuesto más. No hay que olvidar que se presentan en la feria como las máximas figuras.
El fracaso en la plaza de Madrid empieza desde el día que escogen una determinada ganadería y buscan un determinado tipo de toro de la camada con unas características especiales, hijos de uno u otro "padre" o "madre". Hoy hemos tenido toros bobalicones sin transmisión. Pasan y vuelven a pasar como el carretón de entrenamiento.
El Juli, de capote, salió muy animado en su primero, el toro de su confirmación. Resultó casi arrollado en dos chicuelinas muy ajustadas Con la muleta no estuvo a la altura esperada con el blando primero. En su segundo, sexto en el orden de lidia, intentó interpretar su repertorio con el capote: recordamos una excelente media verónica que levanto a los espectadores de sus asientos. Puso banderillas cuadrando los tres pares en la cara. Con la muleta desaprovechó la bondad del toro con más movilidad de la corrida.
Enrique Ponce, no pasó de algunos detalles con la mano izquierda en su segundo.
Rivera Ordoñez, ha sido en esta plaza, una vez más, en " convidado de piedra". Brindó su primero a la Infanta Dª. Elena de Borbón.
Lo mejor de la corrida fue su ambiente, un lleno hasta en las escaleras con la presidencia y los burladeros del callejón a reventar. Todas las primeras filas de los tendidos llenas de caras conocidas del mundo de los negocios, la política,... Primeros "espadas" del poder en este país. Ha sido una tarde de las que las personas cercanas o no al "planeta" taurino no deberían perder la oportunidad de asistir como espectadores a la plaza. La reventa ha estado por las nubes.
Y, ¿qué sería de la fiesta de los toros sin las llamadas figuras del toreo? O al menos, por el número de corridas lidiadas en la temporada. La fiesta de los toros se sigue manteniendo década a década por toreros que levantan pasiones, a favor y en contra. Pero, amigos, en Madrid hay que dar la cara, para nada valen los trofeos cortados en otras plazas. Estos no son un aval que se pueda cambiar.
Y una vez más se repite el dicho popular: corrida de expectación es corrida de decepción.
J.M. Cubero